Regeneración
Regeneración es una noción que procede de “regeneratio”, un término latino.
Se trata del proceso y el resultado de regenerar: lograr que algo recupere su forma o estado original, realizar un tratamiento para que un material pueda reutilizarse o conseguir que una persona deje de lado una conducta dañina.
Algunas definiciones posibles:
1. Poner una cosa deteriorada o gastada en buen estado.
2. Someter una sustancia o un material a un proceso de purificación para que se pueda reutilizar.
3. Concepto intelectual y político: tendencia a regenerar en una comunidad los valores morales y sociales (que se consideran perdidos o aminorados).
4. Regeneración moral: hacer que alguien abandone una conducta o unos hábitos reprobables para llevar una vida moral y físicamente ordenada.
5. Regeneración cultural: tendencia a regenerar en una comunidad los valores morales y sociales que se consideran perdidos o aminorados.
6. Palingenesia: un concepto de origen filosófico, con aplicación a la moral, la política, la religión, etc. El término palingenesia (del griego ”palin”, "de nuevo", y ”génesis”, "nacer") es una doctrina que plantea que cada ser vivo cumple un ciclo de existencia, comprendido desde el nacimiento, pasando por su existencia, luego su muerte, hasta la reencarnación o la resurrección. La doctrina plantea que dicho ciclo se repite una y otra vez, con lo que se asegura la continuidad de los seres. En ese orden de ideas se encuentra el ave fénix, que sería el palingenésico por excelencia. Entre los egipcios, el ave fenix estaba representado por el sol, puesto que ése moría al final del día y renacía cada mañana. Una eterna palingenesia cotidiana.
Según Ronald Sistek, regeneración es transformación. Vivimos inmersos en paradigmas dominantes y paradigmas emergentes, que conviven en el aquí y ahora. El proceso de transformación se da en el pasaje de un paradigma a otro. Esto nos invita a diseñar para la serendipia -la circunstancia de encontrar por casualidad algo que no se buscaba- que nos prepara para sorprendernos en el camino.
La regeneración pone la vida al centro de cada decisión y acción. Aplica a toda forma de vida: praderas, plantaciones, insectos, bosques, humedales, zonas costeras y océanos. Y aplica de la misma forma a familias, ciudades, religiones, comercios y gobiernos. Sin la regeneración de los campos sociales, la regeneración planetaria nunca será posible.
Regeneración es:
- Es crear las condiciones que propician la vida.
- Es poner la vida al centro de las acciones y decisiones.
- Es una dirección de viaje, una forma de ser y de estar en el mundo.
- Es una visión del mundo basada en un nuevo patrón vital de pensamiento.
- Es hacer mejoras radicales y transformativas.
- Es participar en la coevolución de la vida como paradigma.
- Es un viaje, un proceso, una práctica.
Regeneración en biología
En biología, se llama regeneración al proceso por cual se recupera la estructura y la función de órganos o partes del cuerpo dañados. La capacidad de regeneración varía de acuerdo a la especie: mientras que algunas pueden regenerar extremidades completas, otras casi no consiguen concretar ninguna clase de regeneración.
La regeneración puede darse entonces a nivel celular, de tejido, de órgano, estructura e incluso del cuerpo entero, pero en algunos organismos no se da o es altamente limitada. El proceso de regeneración de extremidades faltantes se ha observado en múltiples organismos: salamandras, cangrejos y estrellas de mar entre otros. La regeneración de individuos enteros a partir de pequeños fragmentos se ha observado en planarias.
El ser humano también cuenta con capacidad de regeneración. Las uñas, la piel, el cabello y los huesos pueden regenerarse. Lo mismo ocurre con el hígado, que incrementa su tamaño cuando le falta una parte. En este caso, no crece nuevamente el fragmento que falta, sino que la porción que quedó aumenta su tamaño con el objetivo de compensar aquello que falta.
Los ecosistemas y su capacidad de regeneración
Los ecosistemas se encuentran en un equilibrio natural al que regresan después de una alteración. Sin embargo, hay situaciones en las que el ser humano con su actividad altera este equilibrio introduciendo o eliminando especies animales o vegetales, destruyendo hábitats, transformando notablemente el paisaje.
Esto sucede en multitud de casos cuando se llevan a cabo proyectos en el medio natural que producen modificaciones en el entorno como la minería, obras hidráulicas etc., o cuando un espacio se abandona por perder su función social tradicional, como ocurre con las tierras agrícolas abandonadas o las vías pecuarias. Las actuaciones de restauración tienen como objetivo intervenir de manera que el proceso de regeneración se acelere y las etapas de sucesión natural tengan lugar de una forma menos dilatada en el tiempo.
Para poder desarrollar las correctas actuaciones que terminen con la restauración de un espacio degradado, es importante conocer en profundidad las técnicas de incorporación de elementos naturales (flora, fauna, modificación de sustratos, etc.) más adecuadas a cada entorno, sabiendo diseñar el tratamiento concreto y siendo capaces de devolver el espacio al estado más parecido posible al original.
La regeneración de un ecosistema es “el proceso de asistir la recuperación de un ecosistema que ha sido degradado, dañado, o destruido”. En otras palabras: es el esfuerzo práctico por recuperar de forma asistida las dinámicas naturales tendientes a restablecer algunas trayectorias posibles de los ecosistemas históricos o nativos de una región.
Se entiende que las dinámicas naturales deben estar dirigidas a la recuperación, no de la totalidad sino de los componentes básicos de la estructura, función y composición de especies, de acuerdo a las condiciones actuales en que se encuentra el ecosistema que se va a restaurar. Sin embargo, hay situaciones en las que esto no sucede, como por ejemplo, como consecuencia de las corrientes del Niño y de la Niña.
Tipos de regeneración de ecosistemas
Existen otras formas de plantear la regeneración de ecosistemas degradados que no contemplan las premisas de la restauración ecológica en su totalidad:
• Rehabilitación: actuaciones en las que no se pretende recuperar las funciones alteradas del ecosistema, sino uno o varios elementos singulares de su estructura. Suelen estar orientados a la recuperación de determinadas especies de interés conservacionista que están incluidas en leyes y convenios nacionales e internacionales. Los sistemas resultantes no son autosostenibles, requiriendo una intervención humana directa para el control de determinados procesos ecológicos. Tampoco son totalmente abiertos al intercambio de organismos, materia y energía.
• Recreación: es la creación deliberada de nuevos hábitats como compensación de la pérdida de otros ecosistemas dañados o destruidos en otro lugar. Son ecosistemas no integrados en el entorno donde se realizan, en los que se reproducen determinados aspectos de ecosistemas de referencia. No son abiertos ni autosostenibles, requiriendo una fuerte inversión en su mantenimiento.
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